sábado, 10 de julio de 2010

Mi recuerdo


Eran las cinco de la mañana, no podía dormir, y esta vez decidí irme a la playa, creo que es el mejor sitio donde relajarse, la playa al amanecer, con el sonido del mar, el viento y la primera luz del día. Paseé por la arena pensando en ella, aunque me duele mucho me gusta recordarla y es algo incontrolable, ella es mi mente, es mi pensamiento. Trataba de buscar alguna forma en la que su recuerdo dejara de doler, pero me di cuenta que eso es algo imposible, la he perdido y siempre la recordaré con melancolía porque siempre la echaré de menos. La recordaré como lo mejor que tuve a lo largo de toda mi vida, la recordaré con la alegría de haberme regalado los mejores años que viví pero la recordaré con el dolor de haberla perdido.

Decidí marcharme de la playa y al camino me senté en unas rocas, saque su fotografía de mi cartera, saque el mechero y decidí quemarla, sople las cenizas hacia el mar y desee que su vida fuera maravillosa sin mi, me mate de dolor haciéndolo... ¿Por qué se ha ido de mi? Nuestro amor debía poder con todo...

Sabéis lo peor? Que no supe aguantar ni una hora sin sentir que llevaba su fotografía conmigo, porque de ahí me fui directo a imprimir una de sus fotos para seguir llevándola conmigo, porque me siento incapaz de vivir sin ella.

2 comentarios:

  1. Poco a poco Nacho, el dolor que describes es realmente desgarrador, pero aunque ella haya sido tu vida durante tanto tiempo no te olvides de ti, tú también te mereces volver a estar completo a pesar de no tener su mitad. Espero que algún día puedas volver a soplar esas cenizas de manera definitiva y encuentres un nuevo horizonte al que mirar sin lágrimas en los ojos. Un texto precioso Nacho, la playa sin duda es el mejor lugar para reflexionar y para estar un rato a solas con uno mismo! La foto es preciosa. Un abrazo :)

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  2. Hay que tristeza y cuanta pasion por un recuerdo tan fuerte.
    Que dificil es mantener la vida intacta despues de que suceden cosas asi. Que raro es tener que continuar, cuando definitivamente, sentis, que te falta tu otra mitad.

    Besos!

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